Limpiar la tapicería del coche es una tarea relativamente sencilla, que se debe realizar con cierta frecuencia para mantenerla en óptimas condiciones, principalmente cuando tienes niños. A continuación encontrarás algunos trucos interesantes, para ayudarte a dejar el tapizado de tu coche como nuevo, sin dañarlo.
Consideraciones previas a la limpieza del interior del coche
En primer lugar, hay que responder a la pregunta ¿qué utilizar para limpiar la tapicería del coche y, además, dejar limpio todo su interior? En el mercado se ofrecen muchos productos destinados a lograr que la tapicería quede limpia y en las mejores condiciones. La mejor opción es elegir un producto que quede tipo espuma de buena calidad que, habitualmente, reconocerás por tener un precio situado de la escala media o superior.
Antes de proceder a limpiar, observa detenidamente el habitáculo del coche. Verás que se compone con distintas piezas y sectores, aunque la zona de mayor protagonismo es la tapicería. Luego destacan el salpicadero y la moqueta del suelo. Y, para realizar una limpieza general del interior del vehículo, también debes hacerte a la idea de limpiar el maletero. Sigue leyendo y verás que es más fácil de lo que parece.
Aspira la tapicería del coche y todo el interior
Comienza la tarea realizando un aspirado general del interior del coche, centrándote primeramente en el salpicadero, para luego dedicarte a eliminar el polvo y la suciedad del tapizado de los asientos. A propósito, cuanto más frecuentemente realices este aspirado, más durará el buen aspecto de la tapicería. Si dejas pasar mucho tiempo entre un aspirado y el siguiente, las partículas de polvo, el pelo de las mascotas y las migas minúsculas se van incrustando entre las fibras del tapizado y los resultados de la limpieza son bastante menos satisfactorios.
Comienza aspirando el respaldo y, luego, la superficie y los laterales del asiento del conductor. Luego repite la operación con el asiento del acompañante y, finalmente, realiza el aspirado de los asientos traseros que, al ser ocupados habitualmente por los niños, sus aperitivos y las mascotas, son los que más suelen sufrir. Finalmente, aspira las alfombrillas y el suelo del coche, destino final de la mayor parte de la suciedad que cae y la que traemos en las suelas del calzado.
Limpieza de un tapizado textil
¿Es ahora que debe entrar en acción la espuma de limpieza? Tal vez sí, pero solo se puede utilizar este limpiador directamente si el tapizado está levemente sucio. Si necesita de una limpieza más profunda, hazlo así:
- En un barreño pequeño, prepara una solución de agua y detergente líquido, que puede ser para la ropa o para la vajilla. Si es lavavajillas, utiliza una cantidad muy pequeña y añade un chorrito de vinagre, para neutralizar un poco su acción y que luego sea más fácil de aclarar.
- Impregna una esponja en esa solución, apriétala para quitar el exceso de líquido y procede a frotar, con intensidad pero cuidando de no provocar daños, todo el tapizado del coche.
- A continuación, ahora con agua limpia, realiza el aclarado mediante la misma operación anterior.
- Si notas que quedan leves restos de jabón, repite el paso 3.
- Deja que se seque bien.
- Valora el estado de limpieza del tapizado del coche y, si adviertes que han quedado manchas, trátalas utilizando la espuma de limpieza. En cualquier caso, sigue al pie de la letra las indicaciones del fabricante.
¿Este método de limpieza sirve si el tapizado es de cuero?
Limpiar una tapicería de cuero es bastante similar a la limpieza de un tapizado textil, cuidando de utilizar un producto adecuado para este material. Además, para dar el toque final a la limpieza y que el tapizado quede reluciente, habrá que aplicar una crema nutritiva especial para cuero, la cual también ayudará a que se conserve hidratado y su estética se mantenga inalterable.
Tratamiento de manchas específicas
- Chicle: primero pasar hielo y luego, con una espátula, retirar la goma.
- Grasa y aceite: emplear una mezcla de agua con desengrasante y aclarar lo antes posible.
- Chocolate: solo agua y jabón.
- Tinta: estas son difíciles, pero esmérate y aplica una mezcla de alcohol y agua.
- Maquillaje: líquido para quitar el maquillaje.
- Sangre: frota con agua con sal y, luego, aplica espuma de limpieza. Si la mancha está seca, trátala primero con glicerina y luego procede a la limpieza.