El disco de freno de un coche es indispensable para su correcto funcionamiento, por lo que es fundamental revisarlo de manera periódica para evitar cualquier clase de problemática a futuro.
El funcionamiento adecuado de un sistema de frenos en un coche es multifactorial. Sin embargo, durante una revisión de mantenimiento se suele considerar en primera instancia el estado de las pastillas en vez del espesor que tienen los discos. En este sentido, es válido aclarar que suele ser un error muy habitual creer que en el disco de freno no se genera ningún tipo de desgaste.
El espesor mínimo del disco de freno admisible es el que garantiza la eficiencia de la acción del freno. Es uno de los parámetros a considerar en la revisión de mantenimientos periódicos.
Consecuencias de emplear una anchura mínima disco de freno
Las consecuencias de emplear un grosor mínimo en los discos de freno son las siguientes:
- Deformación del disco que genera ruidos y vibraciones sumamente molestas;
- Generación de grietas debido a las altas temperaturas y al grosor mínimo de discos de freno;
- El usuario debe realizar un recorrido más profundo del pedal debido a que tiene un espesor mínimo en los discos de freno.
Además de los problemas mencionados anteriormente, la utilización de un disco de freno desgastado genera mayor exigencias y averías para el vehículo, como por ejemplo la disminución de la capacidad de freno y el bloqueo de vapor.
Si el vehículo está expuesto por carreteras de montaña, en donde la alta temperatura del disco y las repentinas frenadas son una cuestión común, generan el bloqueo de vapor aumentando la temperatura del líquido a más de 200°C averiando el sistema de frenado por el sobrecalentamiento.
Por otra parte, la reducción de la capacidad de frenado se encuentra intrínsecamente asociada con el incremento de la temperatura por la disminución del espesor del disco de freno y la utilización de manera rigurosa del coche. De todos modos, considerar que el incremento de la temperatura generará una merma significativa el roce de la pastilla y el disco, aumentando la distancia de frenado.
¿Cómo medir correctamente el espesor del disco?
Para determinar de manera correcta el espesor mínimo de los discos de freno es imprescindible emplear un calibre. Se debe considerar que el grosor del disco se debe establecer una medición de al menos 4 puntos y el valor más bajo obtenido se emplea como referencia para todo el disco. Además, es importante destacar que se debe reemplazar los discos de ambos lados a pesar que sea solamente uno el que no superé el límite mínimo establecido de desgaste.
Sin duda, reemplazar el disco de freno hará que el sistema de frenado sea más eficiente y responda de manera eficiente cada vez que sea empleado.