Los radares en las carreteras son un fastidio, ¿quién no ha recibido una multa por uno de estos radares de velocidad? Es cierto que si cumples las normas, no te llegan multas y no tendrás que preocuparte por los radares ni por su presencia en las carreteras, pero también es cierto que los coches actuales son espectaculares, con una calidad elevadísima y una sensación de control y seguridad a bordo que a veces, nos impide saber a qué velocidad vamos y al final, acabados circulando por encima de la máxima permitida.
Muchas personas emplean aplicaciones que informan sobre la presencia de radares y controles en las carreteras. Muy conocida es la aplicación SocialDrive, donde los propios usuarios son los que añaden información relativa a la presencia de la policía en las carreteras, pero también hay otras como el propio Google Maps, que indica donde están los radares fijos en las carreteras (información facilitada por la propia DGT) y donde puede haber radar móvil, aunque no indica el lugar exacto (es ilegal), si no la zona donde podría estar haciendo control de velocidad, información que se puede comprobar en la propia página de la DGT.
Aplicaciones que ahora están bajo el punto de mira de la Dirección General de Tráfico, después de que la Fiscalía de Galicia haya propuesto reformar la ley para que se prohíban estas aplicaciones o se sancione a las personas que las usen para informar acerca de los controles que se realizan en carretera. El director de la DGT, como muchos otros, argumenta que podría haber alguien huyendo de un delito y gracias al aviso de la situación de la policía, este delincuente podría escapar.
En realidad esta noticia no pilla por sorpresa, ya que en 2019, el fiscal de sala coordinador de Seguridad Vial, Bartolomé Vargas, anunció que se encontraba abierta una investigación para analizar cómo la eficiencia de los controles de alcohol y drogas se estaba viendo mermada por este tipo de aplicaciones.
Además, junto a esta posible modificación de la ley, también se tiene previsto endurecer las sanciones por el uso del móvil mientras se conduce. Desde que aplicaciones como WhatsApp se pusieron de moda y llegaron a los teléfonos de todos los usuarios (o casi), el uso del teléfono al volante se ha disparado y los accidentes por distracciones se han multiplicado, superando a los excesos de velocidad y al alcohol.
La multa actual por el uso del móvil al volante asciende a 200 euros y 3 puntos de carnet de conducir. No obstante, se tiene intención de endurecer la sanción hasta los 6 puntos del carnet, algo que por otra parte no será un problema para mucha gente. El aumento de la sanción tiene que ser, además, económico.