El paso mes de Septiembre se vendió el Woods Qeen Victoria Broungham de 1905 por 85.000€, es un coche de más de un siglo que funciona perfectamente y es eléctrico.
Los comienzos de la automoción, se caracterizaron por la lucha entre las distintas compañías por ver qué tecnología prevalecería. La respuesta ya la conocemos, el motor de combustión, pero esto no siempre fue así.
Mucho antes de que llegaran los coches eléctricos modernos ya existían pero cayeron en el olvido porque el motor de combustión se impuso.
A comienzos del Siglo XX, la gasolina ocupaba el tercer puesto en las preferencias de los consumidores, por delante estaban los coches de vapor y los eléctricos y esto era así porque, la gasolina era considerada como maloliente, los coches que la usaban eran muy lentos y también peligrosos porque se tenía que encender girando una manivela que en muchos casos implicaba sufrir lesiones o roturas de brazos y si se fumaba cuando se estaba cambiando el carburante, había un elevado riesgo de incendio.
Por estos motivos, los coches eléctricos estaban muy bien visto y valorados por la clase media/alta y sobretodo por las mujeres ya que tener que encender un coche dándole a una manivela, a parte de resultar peligroso, estéticamente no quedaba bien.
Como dato curioso para comprar gasolina o derivados del petróleo, se hacía en farmacias y para conducir coches de gasolina, se necesitaban muchos conocimientos de mecánica.
” La primera gasolinera del mundo”
Si alguna vez pasas por la ciudad Alemana de Wiesloch, en una farmacia antigua podrás ver un cartel colgado que pone ” Erste Tankstelle del Welt” (” La primera gasolinera del mundo”)
Como ya hemos dicho anteriormente a comienzos de la Sociedad Moderna, los derivados del petróleo se comercializaban en farmacias porque eran producto que se usaban como quitamanchas y disolventes.
El motivo por el que esta farmacia es considerada como la primera gasolinera del mundo es porque en 1888 Berhat Benz, la mujer de Carl Benz que fue el inventor del Automóvil, realizó el primer viaje interurbano desde Mannheim hasta Pforzheim a bordo del Benz Patent-Motorwagen. Hizo 104 Km de ida y 90 Km de vuelta, durante este largo trayecto, ella y su familia pararon para llenar el depósito de combustible y lo hicieron en la farmacia del Sr. Willy Ockel de Wiesloch. Esta fue la primera vez que un automóvil repostaba en un viaje interurbano.
La historia, a veces es caprichosa y ahora parece que la tendencia es ir hacia los coches eléctricos, queda un largo camino por recorrer y es curioso que muy pocas personas sabía de la existencia de los coches eléctrico y que a finales del Sigo XIX y comienzos del XX, estuvieran tan bien valorados.