¿Por qué es importante reparar los golpes de carrocería cuanto antes?
Es cierto que los golpes de carrocería y rayones en la pintura de nuestro vehículo son un verdadero problema pero más aún cuando nosotros tenemos que pagar el arreglo. Ahora bien, a pesar de que seamos nosotros los que tenemos que pagar el arreglo de nuestro vehículo es importante que tengamos en cuenta que nuestro coche necesita estar a la orden del día y no solo por un simple fallo estético.
Cuando nuestro coche lleva un golpe es probable que haya un deterioro en ciertas partes de la carrocería, la cual es la “armadura” del vehículo que nos protege de los golpes en caso de accidente. Si la carrocería ha sufrido un golpe y no lo hemos visto es probable que se haya deteriorado y en próximos golpes podría no cumplir tal y como debe hacerlo.
¿Qué pasa cuando hay un golpe y no se repara?
Hay pequeños golpes superficiales que no dañan las partes internas del vehículo pero muchos otros golpes sí lo hacen y eso nos lleva a estar bajo peligro a la hora de tener accidentes más graves. Vamos a poner un ejemplo muy sencillo: Imagínate que le das un golpe a tu coche en la parte delantera izquierda, como en la imagen.
Pues resulta que no lo reparas porque el golpe parece superficial pero podría haber dañado alguna parte de la carrocería y en un próximo golpe o una colisión frontal esa parte de la carrocería sufriría un impacto mucho mayor y se deformaría mucho más de lo habitual. Teniendo en cuenta que es el lado del conductor ese pequeño golpe puede suponer un antes y un después en tu vida (es así de duro pero es cierto).
Además de que un golpe puede producir un fallo en la estructura del vehículo también puede degradarse todavía más con el tiempo, haciendo que de un pequeño golpe se deformen partes cercanas al golpe, se pudra la chapa y más fallos que hemos visto miles de veces en muchos vehículos.
Tampoco hay que olvidar que a cada golpe nuestro vehículo pierde valor y un vehículo lleno de rayones y golpes no tiene el mismo valor que un vehículo que no los tenga. Recuerda también lavarlo cada cierto tiempo para evitar que el sol, la polución y otros agentes ambientales dañen la pintura. Es importante que no olvidemos nada o por el contrario estaremos arriesgando la salud de nuestro vehículo e incluso la de nuestra cartera si vamos a venderlo algún día.