conducir con chanclas

Estamos acabando las vacaciones de 2020, aunque todavía nos queda verano por delante y buen tiempo. Un verano que ha sido bastante atípico, no cabe duda, ya que hemos ido arrastrando muchas cosas de la pandemia iniciada en marzo, la cual no ha remitido ni mucho menos aunque sí ha permitido salir a quien podía hacerlo, tanto económicamente como anímicamente o profesionalmente.

No obstante, aunque todos los años se comenta, todos los años se tiene la misma duda. De hecho, un estudio afirma que el 14% de los conductores no saben si realmente esa acción que están haciendo es ilegal y el 3% dice que no les pueden multar por ello. El caso es, ¿puedo conducir en chanclas?

Conducir en Chanclas, ¿sí o no?

Bien, la respuesta rápida es: sí, se puede conducir en chanclas, pero con matices. La normativa no dice nada al respecto de conducir en chanclas, concretamente, el artículo 18.1 del Reglamento General de Circulación remarca la obligación del conductor de mantener su propia libertad de movimiento, el campo necesario de visión y la atención permanente a la conducción; y debe mantener la posición adecuada.

Por otro lado, hay más artículos que regulan cómo está el conductor al volante y siguen sin decir nada respecto a las chanclas. Por ejemplo, el artículo 3.1 hacer referencia al modo de conducción, que debe ser precavido para evitar cuando daño, tanto propio como ajeno. Al mismo tiempo, el artículo 17,1 establece que los conductores deben estar en todo momento en condiciones de controlar su vehículo.

Con esto en la mano, la decisión quedaría en la percepción de la Guardia Civil de nuestras capacidades de conducir con chanclas. Las chanclas no van sujetas al 100% al pié, como ocurre con unas sandalias por poner un ejemplo de calzado similar. Se mueve y puede engancharse en un pedal y provocar un accidente. También impiden el libre movimiento de los pies, ya que estaremos más condicionados a no enganchar el calzado con los pedales.

Así, la posibilidad de multa es real y totalmente legal, siempre que el agente que nos haya detenido lo crea posible. La multa es de unos míseros 80 euros, algo que no sirve de disuasión cuando el verano aprieta y la gente empieza a buscar la forma de evitar el sofoco veraniego.

Según un estudio realizado por el RACE, el 30% de conductores encuestados afirma haber usado chanclas alguna vez, un 7% afirman haber conducido sin ningún tipo de calzado y 8 de cada 10 usuarios entiende que la Guardia Civil de Tráfico pueda emitir una denuncia por conducir en chanclas.