El momento de montar nuevas ruedas suele ser un momento de dudas. ¿Qué ruedas pongo? ¿Merece la pena gastar un poco más? ¿Y donde las pongo delante o detrás? Dudas entendibles cuando no se tiene conocimientos sobre automóviles que vamos a responderte.
Las dos primeras tienen rápida solución: hay que montar los neumáticos que indique el fabricante y sí, merece la pena gastar un poco más y no acudir a las marcas blancas “superbaratas” porque no dan los resultados esperados y además, hay que tener en cuenta que es la única parte del coche que toca el suelo. Cuanto mayor calidad, mejor.
Respecto a dónde poner las ruedas, vamos a hacer un inciso y explicarlo un poco más despacio. Hay muchos talleres que en el cambio de neumáticos, ponen las nuevas en el mismo lugar que las ruedas y eso no es correcto. Los neumáticos nuevos deben ir siempre en el eje trasero, sea cuales sean las ruedas que estemos cambiando. Si hemos cambiado las delanteras, pasamos las traseras delante y ponemos las nuevas detrás. SIEMPRE, independientemente del tipo de automóvil y que ruedas muevan el coche.
Diferentes estudios y expertos en conducción, han demostrado que resulta más sencillo e intuitivo controlar cuando se pierde el coche de delante, es decir, cuando los neumáticos delanteras pierden agarre por el motivo que sea. Al contrario, cuando son las ruedas traseras las que patinan se debe tener una experiencia y unos conocimientos que no todos los conductores tienen y por tanto, es mejor asegurar el agarre en esta zona del coche.
Además, existe el fenómeno llamado “desplazamiento de masas”, o dicho de forma más sencilla, inercia. Cuando frenamos, el coche se hunde de delante aligerando el peso que hay sobre las ruedas traseras. Esto provoca que tengan menos apoyo contra el suelo y con unos neumáticos desgastados, es posible que se pierda el control. Así que lo mejor, nuevamente, es asegurar el agarre en esa zona.