El año 2020 no ha sido un año que podamos considerar como normal, ha sido un año atroz y complicado que todavía se deja notar entre la gente y las empresas. Muchas cosas se fueron al traste durante y otras necesitaron de acciones especiales dada la difícil situación que se vivió por culpa de la pandemia y de la cuarentena puesta en marcha para evitar la propagación del virus SARS-CoV2.

Muchas de esas acciones especiales han comenzado a llegar a su fin en los últimos días y todo vuelve a la normalidad, o al menos, a la normalidad que se pueda tener ahora, que todavía luchamos con el virus y seguimos limitados para muchas cosas como el contacto físico, las reuniones de un elevado número de personas o incluso salir a la calle hasta determinadas horas. Una de esas cosas que vuelve a la normalidad es la obligatoriedad de superar la ITV, la cual, se demoró durante un tiempo por el enorme número de vehículos que se quedaron sin pasarla durante la cuarentena que sufrimos entre el 15 de marzo y el 21 de junio.

Durante el primer Estado de Alarma, las estaciones de ITV se vieron obligadas a cerrar al no ser servicios esenciales y al volver a abrir, el caos estaba servido y hubo que establecer un sistema de moratorias para todo pudiera ir cumpliendose poco a poco. Moratorias que ya han llegado a su fin y ponen contra la espada y la pared a todo aquel que no haya cumplido con sus obligaciones. Obligaciones, por cierto, que han tenido tiempo de zanjar desde el final de la cuarentena hasta el día de hoy con suficiente margen.

Ahora, todo aquel que no haya cumplido con la obligatoriedad de acudir a la ITV tiene un problema. Es cierto que durante marzo, abril y mayo, más de medio millón de vehículos no pudieron acudir a la Inspección Técnica de Vehículos y el Gobierno de España estableció un calendario para que se pudiera llevar a cabo tras la cuarentena. De hecho, se establecieron dos: una moratoria para los que no pudieron acudir por el Estado de Alarma y otra, para aquellos que debían pasar la ITV entre junio y agosto, pero no pudieron por los retrasos acumulados.

Las moratorias finalizaron el día 2 de marzo de 2021 y ya no hay excusas para aquellos que no han superado la Inspección Técnica de Vehículos. Hay algunas estaciones de ITV que siguen con una gran acumulación de trabajo, pero hay otras muchas que apenas tienen coches que revisar. Además, para acudir a muchas de ellas hay que pedir cita y eso permite elegir la que menos trabajo tenga con una simple llamada de teléfono o una visita a su página web. Todo está volviendo a su cauce y todo aquel que no tenga la ITV superada no tendrá excusa.

No obstante, según la Asociación Española de Entidades Colaboradoras de la Administración en la Inspección Técnica de Vehículos (AECA-ITV), un 45% de los vehículos que circulan por las carreteras españolas no tienen la ITV en regla. Esto supone un porcentaje que aumenta más del doble respecto a antes de la pandemia. La multa no por no tener la ITV en regla son 200 euros y si se circula con el resultado negativo es de 500 euros. Además, según estudios, el 10% de los vehículos implicados en un accidente de tráfico tienen la ITV caducada. Esto son, apróximadamente, 4 de cada 10 coches y en caso de accidente, no tener la ITV supone que el seguro no nos cubra… entre otras cosas.